Hasta La Madre

Nos quejamos y nos quejamos y nos quejamos. Es el deporte nacional. Y si fuera profesional, perderíamos todos los campeonatos… por quejosos.

La situación actual de México ya superó a todos, a los políticos, a los filósofos, a los intelectuales… y a los quejosos mismos. Y es que todos tenemos algo de que quejarnos. Los que trabajamos, porque no nos pagan lo justo, los que no trabajamos, porque nadie nos paga nada. Y a veces, sólo a veces, no pedimos, EXIGIMOS cosas que no nos corresponden: prebendas, beneficios, apoyos, ayudas. Los que tienen, se quejan porque quieren más, los que no tienen, porque quieren algo, lo que sea, cualquier cosa.

Me encanta Twitter, porque negarlo. Ese concepto de expresar ideas en 140 letras puede parecer una pérdida de tiempo pero a veces, sólo a veces, encuentras cosas, opiniones, personas INCREÍBLEMENTE valiosas. Pero también, porque negarlo, es adictivo saber que hacen y piensan las gentes que te siguen y que sigues. Y el problema con esos “seguimientos”, es que a veces, sólo a veces, por simpatía o por el calor del momento, seguimos cualquier hashtag o trend Tepic o tema de interés y nos dejamos llevar por la “ola” tuitera.

El problema aquí viene a ser cuestionar… ¿qué temas valen la pena?, ¿qué temas son dignos de llevar a tribunas, a opinar, a actuar?. El más reciente “escándalo” tuitero, la supuesta “ofensa”, “agresión”, “difamación”, “discriminación” del idiotita de Esteban Arce a los homosexuales. Yo, lo acepto y lo admito, me dejé llevar. Pero, reflexionando poco después, no encontré la ofensa ni la agresión. De veras. Mirando el video, más bien es ofensivo que alguien cómo la sexóloga ésta, con los conocimientos que ella supuestamente tiene, se deje apabullar por alguien COMÙN Y CORRIENTE, cuyo único gran mérito es estar en una silla que no le queda ni le corresponde. Y de ahí, observen bien, este cabrón ha lanzado MÁS IMPROPERIOS contra el aborto y la libre decisión que contra la comunidad gay, escudado en su supuesta pasión católica y en lo que esta represente.

Pero, claro está, cómo en México NUNCA hemos tenido una verdadera libertad de expresión y cuándo se nos da, cómo ahora, con el twitter, ABUSAMOS DE ELLA, diciendo cualquier clase de pendejada, siguiendo cualquier protesta idiota, sin fijarnos en nuestras palabras. Twitter es, de verdad, un recurso muy rico, con muchas posibilidades y ramificaciones. Usémoslo así. Ignoremos a quiénes merecen ser ignorados (casos AMLO, Fernández Noroña, Arreola), poniendo atención a quién debamos ponerla cómo en esos casos dónde hay que apoyar a alguien en verdadera desgracia. Ya pasó una vez, con el caso de unos chavos que fueron detenidos no sé dónde por no sé que motivos y que igual, se hizo una cadena de tweets que terminaron de manera abrupta cuándo se descubrió que estos chavos tuiteros no eran tan inocentitos cómo se presumía en un principio.

Yo lo sé, todos somos susceptibles de caer en trampas de mentirosos y Twitter, al ser un medio relativamente anónimo (ya me ven, enmascarado por motivos de seguridad… pero NUNCA he difamado a nadie ni lo haré) está exponencialmente más expuesto que cualquier otro medio y/o red social. Por eso mejor hay que fijarnos, hay que dejar de ser huevoncitos y usar el menos común de los sentidos… el sentido común. Antes de lanzar improperios cómo chimpancés enardecidos, revisemos la cuestión del momento a través de todas las ópticas. Busquemos, leamos, descubramos… y entonces sí, lancemos campañas como #estebanarcefueradelaire… o que, ¿de plano falleció el proyecto del #internetnecesario?, ¿nos vale tánta madre lo demás que sólo usaremos Twitter para contarnos chistes pendejos y protestar mamadas?. Yo, por lo pronto, comienzo a actuar y no haré más caso a hashtags idiotas, no los seguiré a menos que pueda encontrar información válida, verdadera. Porque les recuerdo: el #internetnecesario era sólo la punta del iceberg de una serie de impuestos criminales, que ahora debemos pagar A HUEVO por pendejos, por confiados, por conformistas… y por preocuparnos más en que #estbanarcefueradelaire…

Es triste pero es cierto. A mí me mataron en Twitter y re-encarné en Rey Mixteco, simplemente por el gusto de participar e interactuar con muchos de ustedes. Pero ahora estoy considerando MUY seriamente abandonar este medio, esta red social, sí continúa dando prioridad a pendejadas y temas inservibles, si se sigue dejando de lado lo que verdaderamente importa, si seguimos posponiendo lo que se nos viene encima.

Yo, aclaro de una vez para los que vayan a querer entrar a leer esto y opinar más pendejadas, no soy partidista, POR NINGÚN LADO, ni de derecha, izquierda o centro. Me cagan los “políticos” y sus “ideologías”. Si tengo tentación de caerles a patadas a todos. Si tengo intención de hacerles saber que estoy HASTA EL CULO de esa manera indiferente, irrespetuosa de mamarse, comerse y beberse los recursos que SON DE LOS MEXICANOS y PARA los mexicanos. Y esos son los que gobiernan México.

Ya nomás para despedirme y no perder costumbre, #chingasatumadreCalderonAMLOPeñaNietoEbrardParedesOrtegaNavaBarttletCamachoSolís y demás parásitos que pululan por ahí. Y la neta, chingas a tu madre si te ofendes porque los mando a chingar a su madre. Punto.